Mochila Ajena

Pensamos en el mundo…

en cómo tiene que ser.

Lo anhelamos

de acuerdo a nuestras creencias.

Utilizamos un criterio propio,

e intentamos,

todo se ajuste a nuestro modo.

Es unas de las causas

que más desgaste lleva.

La realidad de las cosas

es diferente para todos.

Apenas podemos

hacer acuerdos,

necesarios estos

para sentimos parte de él

y no excluidos.

La realidad es,

que nadie ni nada es perfecto,

y todos estamos cargando

con nuestra propia sombra.

Nos cuesta ver con claridad

dónde la proyectamos,

pero siempre está.

Es un reto

que tenemos en esta vida,

conocerla poco a poco

e intentar ser más objetivos.

No es responsabilidad de nosotros

el cambiar a otro,

porque de esa manera

estamos haciendo algo

que no nos corresponde.

Sí es responsabilidad nuestra

trabajar en nosotros,

y cada uno en sí mismo.

Es fundamental

ver qué es un aporte necesario,

y qué una ilusión

creada por nuestras creencias.

Sin darnos cuenta,

replicamos conductas

de nuestros padres, familiares y amigos.

En esa primera edad,

quedaron grabadas

nuestras costumbres y conductas.

Pero ser objetivos,

ver desde un punto neutral

por supuesto no es fácil,

pero sí que necesario,

y una práctica a tener en cuenta.

De ese modo,

nos dará libertad

para tomar consciencia de otros aspectos.

Ser más empáticos y pragmáticos,

sin imponer nuestras ideas,

pero tampoco asumiendo libremente

las de otros sin un debido análisis.

Es cargar solo lo nuestro.

Es cargar solo lo necesario,

cada uno haciendo su camino.

Para disfrutar,

es fundamental hacerlo liviano

de toda nuestra historia,

perdonando,

perdonándonos,

disfrutando cada día,

disfrutando cada paso,

del aquí y ahora,

en el camino de la Luz.